viernes, 8 de enero de 2010

Ianuarius II: 5 de enero, Nonas: Compitalia

















Observad: en nuestro calendario los primeros y últimos días de cada mes suele haber luna llena y hacia mitad de mes luna nueva.
Si quieres comprobarlo haz click sobre esta imagen de la luna y busca las fases lunares del día del mes correspondiente.

Las Compitalia era una festividad móvil que se celebraba poco después de las Saturnalia, normalmente, el 5 de enero .Ese día, se colocaban muñecos a la entrada de
las casas para alejar de las ciudades y las casas a los espíritus de los muertos
y ahuyentar la enfermedad y la muerte

Tomaban su nombre de las encrucijadas de caminos llamadas compita.

En cada encrucijada se levantaba una capilla en las que se colocaban las imágenes de los Lares, divinidades domésticas que protegían las encrucijadas, murallas y casas.
Se colocaban en los cruces de caminos en el interior de unas capillas en el atrio de las casas o sobre unos altares.
Al principio, durante la monarquía, según nos cuenta Macrobio, se ofrecían sacrificios humanos de niños, pero después , ya al comienzo de la república, ordenó que se ofrecieran a la diosa cabezas de ajo o de amapola en vez de cabezas humanas.

La noche anterior a la celebración, el cabeza de familia colgaba tantas pelotas de lana y muñecos del mismo material como esclavos y personas libres, respectivamente, había en cada casa, para que la diosa Mania (diosa etrusca de la muerte) se contentara con estos objetos y respetara las vidas.

El día de la fiesta los agricultores colgaban en estos templetes sus herramientas de trabajo, y ofrecían sacrificios de cerdos o pasteles, según la situación económica de cada uno. Después se celebraba un festín en el que participaban todos los miembros de la familia, incluidos los esclavos, a los que se dejaba descansar ese día y se daba doble ración de vino. Esta fiesta fue decayendo durante la República. Augusto la restauró.

En el ámbito familiar y privado había tres tipos de divinidades a las cuales los romanos rendían especial veneración, y,a quienes, como pueblo muy práctico que eran, solían tener muy contentos: Manes, Lares y Penates
Los Manes serían el espíritu de los antepasados. El culto a los familiares muertos es muy antiguo y tenía su sentido en un pueblo tan supersticioso como el romano. Tenían miedo de que los espíritus de los muertos se aparecieran a atormentar a los vivos si no se les atendía debidamente con ofrendas, ruegos y sacrificios rituales.
Los Penates son los espíritus protectores de la despensa. Son los que se encargan de que a la familia nos les falte alimento que llevarse a la boca. Sin alimentos no se puede sobrevivir.
Los Lares, dioses protectores del hogar propiamente dicho y de la familia que los habita.

Pero, además los romanos se daban cuenta de que los individuos que pertenecían a la misma familia presentaban ciertas características comunes (física, psicológicas, ciertas enfermedades..) por eso, ellos creían que cada familia tenía un dios que la hacía única y que la diferenciaba del resto y lo llamaron Genius. La palabra Genio está etimológicamente relacionada con gen, generación, engendrar, generar....



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